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Los seis fundadores en 2015 |
Así, el 10 de mayo de 2015 seis moteros de larga trayectoria fundamos oficialmente Iberian Motards Bikers Club, fundadores que llevábamos mucho tiempo sobre las dos ruedas, no éramos nuevos en esto, pero queríamos hacer algo, a nuestro juicio diferente, no hablábamos de un club mejor ni peor que los demás, sino distinto, y así lo pusimos en marcha. Una reunión en el mítico bar motero Rolling Rock fue el punto de partida, redactamos unos estatutos y firmamos el acta de constitución, empezábamos a rodar como club.
Hablamos con el primer MC de Ciudad Real y el resto de clubes con los que íbamos a convivir, queríamos hacer las cosas bien y construir nuestro sueño sobre cimientos firmes.
Con los años unos llegaron y otros se fueron, aquí nunca tuvimos puertas, para entrar es cierto que debes mostrar un cierto compromiso con los colores y responsabilidad, pero nunca quisimos dentro a nadie que no quisiera estar al 100%, agradeciendo siempre a todos la oportunidad de compartir ese tiempo con ellos. Hoy todos los que estamos en este club sabemos bien de qué va el mundo. Tantos años después nos conocéis y os agradecemos a todos los que nos hemos cruzado en el camino los buenos momentos que hemos compartido juntos.
Celebramos nuestro primer aniversario en mayo de 2016, en el que clubes y moteros independientes de muchos lugares acudieron a celebrar ese año con nosotros, nos mostrasteis vuestro apoyo y eso nos ha servido para seguir cada día con más fuerza en este mundo. Un año después cambiamos la fecha a septiembre y así llegaron las fiestas de 2017, 2018 y 2019. En 2020, como tantas cosas con la pandemia de Covid, esa tradición de la fiesta se cortó por dos años y en 2022 la retomamos con un notable éxito, que se volvió a repetir en 2023. En 2024 pensamos que era momento de coger aire y recobrar fuerzas, paramos y no hubo fiesta una vez más, pusimos entonces la vista en 2025, año en que cumpliríamos una década de vida como club.
Iberian Motards Bikers Club sigue aquí como llegó, con ilusión, con respeto hacia el resto de clubes y con ganas de seguir haciendo amigos y kilómetros. Seguimos fieles a ese orgullo de ser moteros y a nuestro lema: Trabajo, Orgullo y Kilómetros, sintiendo que el aire en la cara es nuestro único dueño y señor.
¡Larga vida a Iberian Motards!